Pasas pendiente de las plataformas de apuestas deportivas, buscas los parleys, las combinadas, las fijas de la jornada, en fin, has notado que tu estado emocional cambia según el resultado de las apuestas, y aunque intentes  dejarlas no puedes, eso se llama LUDOPATIA.

En los últimos años el auge de las apuestas deportivas ha generado una serie de adeptos, y esto se debe a varios factores, como por ejemplo: ahora se lo puede hacer desde un celular, existe una facilidad para apostar. Las aplicaciones están disponibles en todas las ubicaciones, sin importar el horario o el día y se puede apostar en deportes y eventos de todo el globo terráqueo.

Antes solo se apostaba al resultado del partido, ahora se puede pronosticar saques, tarjetas amarillas, posiciones adelantas, goles, expulsiones, penales cobrados, un sinfín de acciones durante los partidos.

La inundación de publicidad engañosa que vivimos en el día a día, el atractivo que no únicamente es el azar, sino que hacen creer en las posibilidades que pueden tener los equipos a través de un aprendizaje previo, el fanatismo a un equipo deportivo o la impulsividad de las personas hace que este sea un problema que día a día va creciendo y trae consigo problemas no solo a nivel individual.

Tiene graves consecuencias que van afectando la salud mental de poco a poco, el medio familiar y sobretodo el ámbito económico. Esta acción genera afectación a nivel neurológico provocando una serie de neuroquímicos en el cuerpo, equivalentes a los neuroquímicos  que se produce cuando uno es adicto a las sustancias, que son las que en si generan el placer y la necesidad de continuar.

Una diferencia importante con las adicciones a las sustancias  es que no hay la presencia de la dependencia física, esto quiere  decir, no se va a generar  el “síndrome de abstinencia”. Sin embargo provoca  dependencia psicológica y emocional.

Esta dependencia se presenta con el pasar  del tiempo. Al principio, apostar en juegos es solo por diversión, una diversión aparentemente inofensiva, porque es sobre un deporte que supuestamente se lo conoce bien y se apuesta poca cantidad de dinero. Se continúa apostando por la “sensación del triunfo”  que nos provoca el ganar o casi ganar apuestas, a pesar de que no todas las veces se ganan y ya se empieza a perder dinero.

Sin embargo, esta “sensación de triunfo” cada vez se siente menor a pesar de ganar, y va creciendo la idea obsesiva y la necesidad de volver a jugar, apostando mas dinero y con ello, el malestar que acompaña esta dependencia. La vida empieza a girar sin control en torno a cómo conseguir más dinero para seguir apostando.

Superar una adicción es muy complicado, y más aún una adicción asociada a las apuestas en líneas, para afrontar este problema, es necesario tomar en cuenta los siguientes tips:

ACEPTAR QUE TENEMOS UN PROBLEMA.

Lo primero es aceptar el problema, estar conscientes de lo que nos está pasando y los problemas que nos trae consigo no solo a uno mismo, sino que involucra al medio social y familiar.

SOLICITAR AYUDA

Es increíblemente difícil superar cualquier adicción estando solo, por lo que necesitamos un grupo de apoyo que nos ayude a trabajar en este problema, pudiendo ser la familia o las amistades.

GENERA UN SISTEMAS DE APUESTA CONTROLADA

No se puede dejar bruscamente las apuestas, se podría generar apuestas controladas, donde el dinero invertido sea menor y existía un riesgo controlado, el mismo que con el pasar del tiempo se puede ir disminuyendo.

UTILIZA EL CONTACTO 0

Es una estrategia que implica cortar toda comunicación y contacto con el hecho que me genera el problema, es necesario alejarse de las personas o situaciones que están relacionadas en el mundo de las apuestas. Para esto, te proponemos algunos consejos que puedes realizar: elimina de tu teléfono todas las aplicaciones que tengas de apuestas, veta páginas web, y aléjate de todo lugar donde puedas encontrar sitios para apostar en línea.

PONTE AUTO TRAMPAS A LAS APUESTAS

A más de lo anteriormente señalado, es bueno ponerse algunos impedimentos y recordatorios para no apostar. Por ejemplo, puedes limitar la cantidad de dinero que puedes gastar en un día a través de la aplicación del banco. Puedes ponerte también de fondo de pantalla una foto con la persona con la que te hayas comprometido a afrontar la adicción, o ir escribiendo en una pizarrita cuántos días llevas sin apostar y tenerla visible.

Todas estas recomendaciones deben estar acompañadas de la supervisión de un profesional en la psicología quien te ayudara a afrontar de mejorar manera la sintomatología ansiosa propia de la enfermedad.