(Créditos: Fernando Rodríguez y José Eduardo Mendieta)
Una de las muestras más grandes de amor, fe y devoción colectiva en Latinoamérica, es sin duda la romería de la sagrada imagen de la ‘Virgen de El Cisne’, peregrinación que convoca a cientos de miles de devotos que acompañan fielmente a la ‘Churonita’ en el periplo de 74.5 km, durante 3 días (en la ruta El Cisne – San Pedro – Catamayo – Loja).
Primer Reporte, como un homenaje a la Reina coronada de El Cisne presenta un fotorreportaje de lo que fue el acompañamiento realizado el año anterior por parte de nuestro equipo periodístico, durante los tres trayectos de este recorrido.
El recorrido inicia junto a Luisa Valladares. Ella en compañía de su familia viajaron desde la provincia del Azuay para visitar y acompañar en su peregrinar a la ‘Virgen de El Cisne’ y de esta manera agradecer las bondades recibidas. A su arribo cerca de las 23:00 (16 de agosto), movidos por el amor a María, realizaron una larga fila de más de 1 hora, todo para poder contemplar de cerca de la sagrada imagen.Miles de caminantes acompañaron a la imagen de la ‘Virgencita’ en su última noche en la parroquia El Cisne. El interior y exterior del templo, las casas posada, graderíos e incluso plazas, son aprovechadas por los visitantes tener un poco de descanso antes del recorrido, todo esto ante la inclemencia de la noche con temperaturas por debajo de los 10° C.Minutos antes del inicio de la eucaristía de despedida 05:30 am (17 de agosto), se da inició al operativo policial que resguardará junto a los ‘gancheros’, el peregrinar de la portentosa imagen. 10 horas antes del inicio de su recorrido, la ‘Churonita’ es ubicada en la urna especial, conocida como “el anda”.Uno de los peregrinos es Juan N. de la parroquia Malacatos del cantón Loja, él, con su tierno hijo en sus brazos poco a poco avanza en su caminar hacia San Pedro de la Bendita. En el fondo de la imagen se observa cómo de a poco queda atrás la parroquia El Cisne.Uno de los puntos claves para refrescarse durante la primera etapa de la caminata es en el sector conocido como el “Agua del Milagro”. Lourdes Pinta, romeriante, se toma su tiempo para juntar un poco de esta agua que más adelante le servirá para hidratarse y también para llevar a su hogar.Familias enteras recorren el primer tramo de la romería desde El Cisne hasta San Pedro de la Bendita, este fue el caso de Manuel Muzha, oriundo de la ciudad de Cuenca. Él desde hace más de 10 años atrás realiza este peregrinar con sus seres queridos y siempre acompañado de una pequeña réplica de la portentosa Virgen María.Carlos Astaiza, machaleño, es uno de los centenares de devotos que caminan descalzos como agradecimiento por las bondades recibidas por la ‘Churonita’ (salud, trabajo y la unión familiar). Son 7 años consecutivos los que Carlos realiza este sacrificio. Su ruta comprende El Cisne – San Pedro de la Bendita – Catamayo.En el sector conocido como la hacienda “La Bendita” los romeriantes hacen un alto para participar de la eucaristía, alimentarse, hidratarse y así continuar junto a la imagen de la Virgen de El Cisne este recorrido.Las muestras de fe durante los tres días de peregrinación son múltiples. Una de ellas es la de este caminante que avanzó descalzo por toda la ruta de El Cisne hasta San Pedro. En su espalda una réplica de la ‘Reina de El Cisne’ ubicada en una urna de madera; además, con sus manos empujaba una carriola de su pequeño hijo.Minutos antes a la salida de la imagen de la ‘Virgencita’, desde San Pedro de la Bendita rumbo a Catamayo, 05:00 am (18 de agosto), muchas personas aprovechan para colocar velas y elevar una oración implorando favor, agradeciendo por algún milagro recibido o simplemente para pedir fortaleza y decirle presente, en esta nueva jornada de recorrido.La gran cantidad de caminantes azuayos es significativa. Muchos de ellos aprovecharon las primeras horas de la mañana (06:10 am) para iniciar la peregrinación del segundo tramo de la romería desde San Pedro de la Bendita, hasta Catamayo, un recorrido de 16 km.
El astro rey, acompaña durante este recorrido de fe. Mujeres, niños, personas de la tercera edad fueron parte de este recorrido.La romería es también un espacio adecuado para generar un impulso a los microemprendimientos que acudieron de varios puntos del país para expender: alimentos, gorras, gafas, hasta música de alabanza a la soberana de El Cisne.
Impresionantes lecciones de entereza y sacrificio se observaron durante el recorrido de parte de los peregrinos, cada uno con una historia diferente; pero, sobre sus hombros la consigna de cumplir su promesa. Este caminante acompañó a la sagrada imagen durante los 3 días de recorrido, cargando su cuadro de la “Churonita”.La sagrada imagen de la “Virgen de El Cisne” durante su recorrido va vestida de peregrina; además, ella y el niño Jesús utilizan un vistoso sombrero de paja toquilla que los identifica con su pueblo romeriante.Con el arribo de la imagen de la “Virgen de El Cisne” al centro de la ciudad de Catamayo 14:30 (18 de agosto), se realiza la bienvenida y el parte de policial, donde se entregó la custodia de la ‘Churonita’ al obispo de Loja. Acto que tuvo lugar en los exteriores del templo “María Auxiliadora”.
La imagen de la ‘Churonita’ en el tercer día de romería es acompañada de miles de devotos. A su ingreso a la ciudad de Loja, entre aplausos, cánticos, alabanzas y lágrimas de alegría. Se realizan varias eucaristías en este trayecto: en el sector la Urna, barrio Belén, la zona Militar y la Catedral.
Uno de los instantes más especiales y emotivos de esta peregrinación es el paso de la sagrada imagen por la “Puerta de la Ciudad”, donde ya se la observa vestida de Reina y portando su hermosa corona.
Las principales calles de la ciudad de Loja se llenan de alegría con el paso de la portentosa imagen. Desde los balcones de las casas la reciben a la ‘Churonita’ lanzándoles rosas como signo de respeto y amor infinito.
