En el 2014, Luis Gabriel Andrade decidió transformar su pasión por la repostería en una propuesta emprendedora que hoy se ha convertido en un referente local de creatividad y sabor: Bocates, una marca lojana que nació como un servicio de catering de bocaditos y chocolates, y que con el paso del tiempo ha conquistado paladares y espacios en el mercado.
“Bocates surgió como respuesta a la falta de microempresas en la provincia que generen empleo y desarrollo”, comenta Andrade, quien ha visto en el emprendimiento una oportunidad no solo de crecimiento personal, sino también de aporte al progreso económico de Loja.
Actualmente, Bocates se distingue por su especialización en bombones con rellenos exóticos, una propuesta artesanal que combina calidad, presentación y un toque de innovación. Pero su expansión no se detuvo ahí. Andrade y su equipo crearon la marca Trajano, que ofrece alfajores, galletas y chocopop Omo, productos que nacieron como una respuesta a la demanda del mercado y a la necesidad de diversificar la oferta.
Mientras los productos Bocates se encuentran disponibles en los principales autoservicios de la ciudad de Loja, la línea Trajano tiene una presencia destacada en ferias y eventos temporales, donde ha logrado cautivar a un público cada vez más amplio.
El crecimiento de Bocates no solo se mide en ventas, sino también en su impacto positivo dentro de la comunidad. Con más de una década de trayectoria, este emprendimiento lozano se consolida como un ejemplo de cómo la creatividad, la perseverancia y el amor por el trabajo pueden transformar una idea casera en una marca reconocida, que endulza el día a día de quienes apuestan por los sabores auténticos y locales.
Bocates, más que un nombre, es una historia de sabor y progreso hecha en Loja.
