Por más de una década, el trabajo de Karina Añazco Campoverde ha destacado en diversas instituciones públicas del país, consolidándola como una de las comunicadoras lojanas con trayectoria y proyección nacional. Nacida en Alamor, cantón Puyango, creció entre las tradiciones, la calidez y la identidad de su tierra, elementos que —asegura— han marcado su carácter y la forma en que ejerce su profesión.

Desde hace 14 años reside en Quito, ciudad a la que llegó movida por el anhelo de adquirir experiencia profesional para, algún día, ponerla al servicio de su provincia. “Salí de Loja para formarme, para crecer, para aprender, y todo ese conocimiento siempre ha tenido una misma meta: retribuir a mi tierra”, señala con convicción.

Formación con identidad lojana

Karina inició su educación secundaria en el Colegio Técnico Puyango, un espacio que —recuerda— le dio las primeras herramientas para proyectar su vocación. Luego continuó sus estudios universitarios y de posgrado en la Universidad Nacional de Loja (UNL), donde obtuvo su formación profesional y su maestría.

Ese vínculo académico con la UNL, afirma, fortaleció su compromiso con la comunicación como herramienta social, humana y estratégica, y la llevó a asumir retos cada vez más exigentes en el ámbito institucional.

Una carrera marcada por la responsabilidad pública

La trayectoria de Karina Añazco destaca por su paso en importantes instituciones del país, donde ha ocupado cargos de alta responsabilidad. Entre ellos:

Directora de Comunicación del Hospital de Tercer Nivel Carlos Andrade Marín

Directora Zonal 7 de Comunicación en el Ministerio de Salud Pública (MSP)

Directora Zonal 7 de Comunicación en el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP)

Directora de Comunicación en los GAD municipales de Celica, Pindal y Saraguro

Directora Nacional de Comunicación en el Seguro Social Campesino

Relacionista Pública de la cadena hotelera cinco estrellas Grand Victoria

Actualmente se desempeña como Periodista Profesional en el Hospital General del Sur de Quito del IESS, donde desarrolla contenidos, coordina procesos comunicacionales y cubre información institucional de alto impacto para la ciudadanía.

Su paso por estas entidades demuestra no solo su capacidad técnica, sino también su compromiso con la comunicación pública y su convicción de que el trabajo en territorios y sectores vulnerables exige profesionalismo y sensibilidad humana.

Loja, el corazón que siempre llama

A pesar de su vida profesional en la capital, Karina confiesa que lo que más extraña de su provincia es aquello que lleva grabado desde niña: su familia, la gastronomía, la cultura y las tradiciones lojanos. “Lo más duro de estar lejos es la ausencia de mi familia. Ningún logro profesional reemplaza el abrazo de los seres que uno ama”, expresa.

Sin embargo, esa nostalgia también ha sido motor. Mantener un vínculo permanente con Puyango y Loja le ha permitido recordar por qué decidió abrirse camino fuera y por qué mantiene viva la convicción de volver, en algún momento, a entregar todo lo aprendido.

Una profesional con propósito

La historia de Karina Añazco Campoverde es la de miles de lojanos que partieron en busca de oportunidades, pero que nunca han dejado de mirar hacia su origen. Su trayectoria, marcada por la responsabilidad, la constancia y el sentido de pertenencia, refleja el valor de los profesionales que ponen su formación al servicio del país sin olvidar su raíz.

Con su trabajo diario en el ámbito de la salud pública, Karina reafirma que la comunicación es un puente entre instituciones y ciudadanía, un espacio donde la ética, la sensibilidad y la vocación se vuelven fundamentales.

Su meta, dice, sigue siendo la misma: “crecer profesionalmente para devolverle a mi provincia todo lo que me ha dado”.