Redactado por: Julissa Rojas
Nace en Loja, el 30 de marzo de 1984, sus estudios primarios y secundarios los realizó en la escuela Miguel Ángel Suarez y en el colegio la Dolorosa, los estudios de tercer nivel en la Universidad Nacional de Loja en la Carrera de Psicología Educativa y Orientación Vocacional, escogió la Carrera porque en aquel tiempo no había apoyo a la música y pensaba que ser músico no iba a ser un futuro para él por lo que decidió escoger otra Carrera para que sea como un apoyo a la música.
La Carrera de Psicología le ayudó mucho a madurar, a ser una mejor persona y ver la vida de diferente manera, luego de eso descubrió que verdaderamente su futuro era ser músico y se dedicó todo el tiempo a la música. Su afición por la música es desde muy pequeño, aproximadamente a los 12 años, empezó escuchando música de Julio Jaramillo porque sus padres escuchaban ese tipo de música, y él traviesamente agarraba los casetes y se ponía a escuchar solito en su cuarto desde ahí comenzó un gusto muy especial por la música primordialmente por ese estilo de Julio Jaramillo.
Luego de eso pasaron los años y su madre, quien más tiempo pasaba con su familia siempre le decía que lo iba a ingresar a un curso de canto y efectivamente después de unos dos años de su ofrecimiento ingresó a la academia de música de la Casa de la Cultura de la muy recordada licenciada Estela Betancourth que hoy en día radica en Quito, ella fue la que lo impulsó a seguir en el mundo de la música enseñándole su técnica y su forma de cantar y está muy agradecido porque gracias a ella descubrió su tonalidad y su estilo de música, aunque ahora se dedica a muchos estilos de música para poder salir adelante, con ella y con el coro de la Casa de la Cultura viajó a muchos lugares del país y de esta manera, fueron conociéndolo.
Entró a la universidad, pero no estudió música, se dedicó a la docencia obteniendo el título de Licenciado en Psicología Educativa. Pese al hecho de no haberse preparado profesionalmente en la música, su amor por ella se mantuvo intacto. Se dedicó a trabajar poco tiempo en su profesión y tiempo después optó por dedicarse a lo que le apasiona y dar espectáculos al público. De esta manera, fue entrando en muchas agrupaciones musicales como es la prestigiosa orquesta de Loja Sabe a Caña, dentro de ella aprendió mucho en el ámbito musical tropical ya que gracias a ella tuvo la oportunidad de participar en Piñas y así fue creciendo el amor a la música.
Actualmente, se desempeña en la música ranchera que siempre ha sido parte de su vida y desde pequeño escuchaba a Pedro Fernández, Alejandro Fernández y Vicente Fernández y en el transcurso de la pandemia el amor a la música ranchera volvió a nacer en él, inició un proyecto con su gran amigo Ronald Prado, realizando una canción en dúo denominada Perdón en la época de plena pandemia. Hace tres meses crea un trío con su amigo Agustín, denominada México en la Sangre.
Lo que más recuerda de su infancia es las vacaciones que realizaba con sus primos a Quito donde su tía Albita, viajaba en el bus de la Panamericana que había en aquellos tiempos, eran buses muy lentos que se demoraban 24 horas de Loja hasta Quito, pero ellos eran felices viajando recordando una de las etapas más bonitas de su infancia, además recuerda canciones que le llenan de nostalgia y sentimiento, aquellas épocas bonitas que vivía con sus primos y su familia.
Tiene 14 años de feliz matrimonio en el que procreó 3 hijos Andresito, María Alejandra y María Beatriz, en la formación de sus hijos es muy estricto porque le gustaría que ellos sean unas personas independientes, participativas y sepan actuar ante la sociedad inculcando valores y sepan desenvolverse por sí solos. Se considera un buen esposo y buen padre porque en realidad la vida es muy complicada más aun en el ámbito de la música porque siempre se tiene sus tropiezos y de eso se aprende.
Lo que más disfruta es estar en familia, es ver películas, viajar y sobretodo compartir en el hogar. En sus tiempos libres se dedica a su empresa que distribuye colecciones a escala nacional. Últimamente, se está dedicando a lo que es la distribución de productos de protección para médicos como visores y mascarillas junto con otra empresa que tiene en Quito.
Le gusta mucho el fútbol pero desde la pandemia no ha hecho deporte pero ya tendrá la oportunidad de volver a retomarlo después de que todo mejore, en su casa si realiza un poco de deporte para mantenerse en forma. Es hincha de la Liga de Loja a pesar que no está en la categoría, pero es su ídolo.
El momento más feliz de su viva es cuando nacieron sus hijos siendo la alegría más grande que ha sentido al momento de verlos nacer y tenerlos en sus brazos es una alegría inexplicable.
Lo que siempre lo pone feliz es llegar a su casa después de un día de trabajo y agradecerle a Dios por darle la oportunidad de seguir viviendo. El momento más triste de su vida fue cuando murió su abuelita ella fue la persona que siempre estuvo con él y sus hermanos cuando eran niños hasta la adolescencia porque sus padres trabajaban todo el tiempo y no pasaban mucho en casa.
Es una persona muy puntual y organizada y no le gustan las cosas al apuro porque siempre hay contratiempo en las cosas que uno hace y se considera amante de la puntualidad y no le gusta la gente impuntual y, desde niño, le enseñaron a ser ordenado y siempre le ha gustado todo impecable en este aspecto.
Israel se mira a futuro como un padre orgulloso de sus hijos, como un gran artista lojano y del Ecuador, además de tener muchas metas por cumplir y mucha música por deleitar y con la bendición de Dios llegará lejos porque el sacrifico que realiza hoy algún momento tiene su recompensa.
Le gustaría que lo recuerden como una persona alegre, solidaria que siempre está ahí cuando lo necesitan y sobre todo como él se considera como un ser humano bueno.
