Bolívar Enrique Loján Fierro más conocido como “súper cuy”, es un lojano que ha dedicado gran parte de su vida a la ingeniería, la política y el deporte.
Nació en San Cayetano Alto, en un ambiente tranquilo donde vivía su vida a plenitud. Inició su formación académica en la escuela José Antonio Eguiguren y la secundaria en el colegio Bernardo Valdivieso. En 1968 se le presentó la oportunidad de viajar a Venezuela, donde estudió Ingeniería de Sistemas en la Universidad Central de Venezuela.
Era tan grande su talento, que para 1980 ya pudo formar sus propias sus empresas de computación. Posteriormente, siguió formándose, realizó un postgrado en Sistemas de Información y también uno en Contabilidad.
Luego de radicar por 42 años en Venezuela, regresó a su natal Loja en 2010, donde pudo realizar una Maestría en Ciberseguridad.
Los deportes extremos también son una de las pasiones del “súper cuy”, el atletismo, ciclismo y natación. Recuerda que en 2010 en una competencia en Catamayo, su bicicleta presentó un incidente lo que produjo que Bolívar se accidentara y quedara cuadripléjico. “Luego de mi accidente tuve una fuerza de voluntad increíble para recuperarme, por eso ahora cuando doy un paso por las calles de Loja, me siento el hombre más afortunado del mundo”. Reconoce que el accidente es un claro indicador de que es un hombre que se esfuerza con el fin de no soltar sus objetivos.
A Bolívar le gusta contribuir al conocimiento de la gente, es por ello, que a través de su blog enseña matemáticas a diferentes personas del mundo.
Se autodefine como un hombre sociable, alegre, terco, empecinado y con objetivos claros. Además, de un completo apasionado por la lectura y el cine.
Uno de sus anhelos es poder dejar un legado, que le recuerden como aquel hombre que investigaba y que nunca ha sido egoísta con los conocimientos y que siempre compartía con el mundo lo que iba descubriendo. “Yo le he dicho a mi esposa que cuando muera quiero que me incineren y mis cenizas las pongan a un pie de un árbol de La Catedral, para que me visiten todo el mundo, hasta los perritos”.