Hablar de María José Aguirre es referirse a una carismática comunicadora, que hace de la comunicación su pasión. Pues lleva más de una década dedicada a ella.

La perseverancia, trabajo y superación son los términos que han marcado su carrera, en la que se ha destacado como locutora de radio, presentadora de tv, comunicadora de algunas entidades, maestra de ceremonia y voluntaria de Solca Núcleo de Loja.

En el ámbito laboral, trabajó en UV Televisión y como comunicadora de la Cruz Roja Ecuatoriana Junta Provincial de Loja. Actualmente, trabaja con el Hospital Clínica San Agustín, es presentadora de noticias en Plus Tv y desde hace ocho años es locutora en radio Súper Láser.

Se define como una persona auténtica, sincera, honesta, alguien que se considera como una buena amiga, hija y madre. Un ser humano que da lo que le gustaría recibir y sobre todo que no le gusta hacerle daño a nadie.

Pero no todo es trabajo en su vida, el deporte es otra de sus pasiones, en la actualidad, juega básquet y fútbol, disciplinas que por falta de tiempo no ha realizado con frecuencia. Además, le gusta leer, no obstante, su mayor prioridad es ser madre a tiempo completo. Antonella es el centro y motor de su vida, la niña por la que sacrifica y sale adelante con firmeza y determinación.

Para María José es súper importante que su hija se sienta orgullosa de lo que hace, por eso siempre va de la mano con ella y con la guía de su papá que vela sus pasos desde el cielo. Tras la irreparable pérdida de su progenitor, aprendió a ser más fuerte, constante y luchar más por sus sueños.

Hoy en día se siente como una mujer realizada que está cumpliendo sus metas. “Hace algunos años, si hubiera podido pensar como quisiera verme, sería tal cual como estoy ahora, y también en un futuro me veo igual, cumpliendo mis sueños con pasos firmes”.

Su mensaje es claro, María José dice que la constancia y la disciplina son fundamentales para conseguir los anhelos que cada ser humano tiene. Pero que el principal objetivo es enfocarse en ser buenas personas. “De la grandeza del corazón habla la boca”.