Redacción: Jonathan Benítez

Desde que llegó la pandemia a Loja, diversas instituciones educativas tuvieron que suspender las clases presenciales y cerrar. Actualmente, la escuela Manuel Ignacio Monteros ubicada en Obrapía aparentemente se encuentra abandonada y sin recibir mantenimientos desde hace ya mucho tiempo.
María Bacélica de 69 años, vive junto a la institución y nos comenta que cuando llueve ciertas zonas de la escuela se inundan porque los canales junto con otras partes de estos están rotos, llenos de basura. Además, el agua de estos canales en mal estado también afecta directamente a su vivienda, pues toda el agua que cae del techo de la escuela ha dañado y ensuciado varios de sus cultivos. “No hay con quien hablar o dar aviso, ningún encargado viene desde hace meses”, comenta Bacélica.
Por todo esto, la señora no tiene más remedio que esperar que inicien las clases presenciales para ver si de esta manera llegan los directivos a poner correctivos para que los estudiantes reciban clases y su casa no se llene de basura.